Con el final del campeonato llegan los balances. Y a menudo esas miradas hacia atrás son descalificadas mediante el argumento que supone que “es fácil hablar con el diario del lunes”. Es decir, criticar cuando los hechos ya están consumados.
Varias veces, a lo largo de este año, más de un hincha de All Boys habrá dicho “yo sabía que Gigliotti la iba a romper”, o “yo sabía que Pavone era un burro sin rodillas que vino a robar” (por citar el caso de los dos centrodelanteros que se incorporaron en el plantel para el Nacional B). Pero claro, el momento para decirlo era en julio de 2008, antes de que los 16 goles de uno y la horrible imagen carente de toda rodilla que dejó el otro ayudaran al simpatizante a formar su opinión.
Por eso, el momento de hablar de la temporada 2009/2010 es ahora.
Fue un año decepcionante para quienes confiábamos en la inercia triunfal del campeonato de 2008, sobretodo viendo que el otro equipo que llegaba al Nacional B como campeón ascendente, Atlético Tucumán, terminó llevándose el torneo y hoy está en Primera.
Pero hubo buenas: se mostró personalidad y se ganaron partidos en el Interior y, lo principal, se mantuvo la categoría. Es decir, sería ridículo pedir “que se vayan todos”, pero también lo sería reclamar “que se vayan muchos”.
Primero, habría que repetir la decisión básica que se tomó hace un año: mantener el equipo y a su entrenador, Pepe Romero.
Los pilares del campeón de la B Metropolitana, a pesar de que tuvieron un año bastante desparejo, también fueron fundamentales este año para que el club se quede en el Nacional B. All Boys debería, entonces, mantener en su plantel al Grupo de los 8: Cambiasso, Fayart, Madeo, Panceri, Sánchez, Steffanato, Zárate y Solchaga. El esfuerzo que implique retenerlos, estará bien justificado. Después de todo, ningún refuerzo económicamente accesible garantizará rendimientos mejores que estos ocho campeones.
Otros jugadores, aunque no se destacaron demasiado, tienen el crédito abierto, como Vella, Vieytes, Lautaro Álvarez y Ferrari. Sumo aquí tres casos más discutibles: Scamporrino (su contribución al título del 2008 exige que se lo espere), Umbides (fue el segundo goleador del equipo, con 5 gritos) y Torassa (su 06/07 fue tan bueno que amerita jugarle otra ficha, a pesar de su bajísimo presente).
En esta lista, claro, falta Gigliotti, cuya explosión hace seguramente imposible su continuidad.
No parece imprescindible que sigan Patricio González, Simón Ramírez, Krikorián, Arriola o (con todo el cariño del caso) el Facha Bartelt.
Después llegará el momento de escribir sobre refuerzos. Pero, antes de que salga el diario del lunes, el Álbum Blanco vota por mantener la base.
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cIONCIDO con vos... buen relato y arriba el albo...!!!
ResponderEliminarGracias Buenaventura!
ResponderEliminarUn abrazo
No termine de entender si segun vos fue buena o mala la campaña...
ResponderEliminarObviament todos queriamos el acenso directo y si bien fuimos muy irregulares...
Yo estoy muy contento con el Blanco... por mantener el plantel el tecnico por que se mantubo la categoria! y por que el Club esta creciendo...
Hola Verónica, la verdad es que antes del torneo yo lo veía con chances de ascender a Primera. Y por lo que fue pasando, terminé muy feliz con mantener la categoría.
ResponderEliminarMi balance final es agridulce, con un comienzo "agri" y con un final "dulce"...
Saludos